La otoplastia o cirugía de orejas, es una de las operaciones de cirugía estética que se realiza para reposicionar las orejas prominentes o para reducir el tamaño de las orejas grandes. Esta es una cirugía que se realiza la mayoría de veces en los niños.
La finalidad de esta cirugía estética es evitar que las orejas estén ubicadas de forma muy pronunciada hacia el exterior de la cabeza o reducir el tamaño de las orejas que suelen ser abultadas, o alguna forma irregular que estas tengan.
Generalmente los pacientes, sean niños o adultos, luego de la cirugía se sienten bien, aunque se recomienda permanecer una noche en la clínica hasta que desaparezcan los efectos de la anestesia general. Las orejas pueden doler los primeros días, pero con un buen cuidado y medicación se alivia fácilmente
Es muy importante seguir las instrucciones del cirujano plástico respecto al uso del vendaje que el paciente debe utilizar, sobre todo por la noche. Además se debe evitar durante el primer mes actividades donde puedan doblarse las orejas.
La mayoría de los adultos vuelven al trabajo a los 5 días de la cirugía; los niños vuelven al colegio en unos 7 días, siempre y cuando tengan cuidado con las actividades físicas.
