Los beneficios del drenaje linfático son numerosos este tipo de tratamiento favorece tanto la salud como la belleza. El drenaje linfático tiene como principal objetivo contribuir a que el organismo pueda protegerse mejor y a que elimine de una manera más efectiva los desechos que origina de forma natural.
Para que esto funcione correctamente, debe ser realizado por kinesiólogos o profesionales del área de la salud, ya que tienen conocimiento de anatomía y saben localizar con exactitud la posición de los ganglios.
Además, también se consigue una vasoconstricción de los capilares sanguíneos, los movimientos que se producen durante el tratamiento tienen también un efecto sedante, por lo que es ideal para las personas que sufren estrés y para aquellas personas que atraviesan procesos agudos de dolor, lo que consigue un reequilibrio de toda la masa muscular y un aumento de la movilidad intestinal, es efectivo para eliminar líquido y sustancias de desecho, el drenaje linfático debe ser indoloro y jamás dejar moretones. En una liposucción va asociada a un tratamiento de drenaje linfático, que ayudará a eliminar la grasa sobrante tras la cirugía.
Tanto por razones médicas como estéticas, desgraciadamente el drenaje linfático no está recomendado para todo el mundo. Aunque, es el médico especialista el que debe determinar cada caso, algunas de las contraindicaciones más habituales se refieren a pacientes que atraviesan procesos de cáncer, a los que tienen problemas cardiovasculares severos, alteraciones de la tensión sanguínea y descompensaciones de la glándula tiroidea. No se debe realizar en la zona abdominal durante el embarazo, aunque sí se recomienda en las piernas para mitigar la acumulación de líquido.
Una sesión de drenaje linfático asistido dura unos 30 minutos, pero lo mejor es combinarlo con un masaje manual hasta completar la hora de tratamiento, en general, luego de un mes y medio se ve el resultado final, pero desde la primera sesión ya se comienzan a notar cambios. Terminado el tratamiento hay que hacer un plan de mantención que puede incluir una sesión cada dos semanas o incluso una al mes.
En pocas palabras, es una técnica de masoterapia que estimula, a través del sistema linfático superficial (ganglios), la eliminación de líquido y sustancias de desecho acumuladas en el organismo, pero este tratamiento tiene contraindicaciones.